Más de trescientos kilogramos de narcóticos incineró el viernes la Delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) en Baja California Sur, encabezada por José Bernal Romero, quien estuvo acompañado en el acto por autoridades militares, así como estatales y municipales.
Derivada de la denuncia interpuesta en febrero de este año, por Héctor Martín Ojeda de la Rosa, en contra de Guillermo Mercado Romero, Leonel Cota Montaño, Narciso Agúndez Montaño, y demás funcionarios, por agravios en contra de la libertad de expresión, intento de homicidio y daños a propiedad ajena cometidos durante dieciocho años, el llamado por algunos, “periodista maldito” y quien buscara contender de manera independiente como candidato a alcalde de La Paz en las pasadas elecciones, se presentó en la Procuraduría General de la República (PGR) la tarde de ayer para comparecer ante fiscales especiales acerca de la denuncia mencionada.
Aún no han sido inauguradas oficialmente, pero las oficinas de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), en La Paz, ya están en operaciones. Desde el 28 de abril han recibido alrededor de 20 quejas.
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