La Paz, Baja California Sur.– A posiciones aparentemente irreconciliables se ha reducido el conflicto entre comerciantes establecidos del centro de la ciudad de La Paz y vendedores de puestos semifijos, pues los primeros se niegan a que se coloquen puestos en los cajones de estacionamiento del primer cuadro de la ciudad.
Los comerciantes establecidos específicamente de las céntricas calles Revolución, Madero y Degollado se niegan a permitir que los propietarios de puestos semifijos permanezcan en esa zona, y precisamente un requisito para que los vendedores puedan tomar la vía pública es contar con la anuencia del colindante y de la Dirección de Movilidad.
Los comerciantes establecidos piden que a los puestos semifijos se les reubique.
«No es posible que se sientan dueños de la vía pública. Hay pocos cajones y los van ubicar ahí, no es posible, a nosotros nos regulan por todo. Que los ubiquen dónde no estorben».
Esa actividad informal, señalaron los comerciantes establecidos “les afecta” y consideraron puede ser “el tiro de gracia” para el centro.
Por su parte, los comerciantes de puestos semifijos exigieron se les permita ejercer su actividad comercial en la misma zona en la que lo han hecho durante años.
En ese sentido, la directora de Comercio del Ayuntamiento de La Paz, Cintia García, tras reconocer que se ha llegado a posiciones irreductibles, señaló que no va a ser fácil conciliar a las dos partes.
“El chiste es que todos puedan trabajar”. (Ambas partes) tienen que llegar a un acuerdo para convivir, para acordar dónde se pueden poner para que puedan ejercer su actividad, sin embargo hay, de parte de los semifijos, resistencia al cambio y ser reubicados en otra zona, dijo.
La funcionaria comentó que seguirán las negociaciones entre partes, pero advirtió que hay un reglamento y se debe de cumplir.
El centro se ve horrible con tanto ambulantaje, recuerdo en tiempos pasados el centro era un lugar de ir a disfrutar, de ver observar, y ahora ni ganas, y entiendo al comercio formal, esa gente no debe estar ahí, no es su lugar, y el problema es de ellos, que se aplique la ley.
Alguien dígale a la directora que para eso está el gobierno, en este caso ella, en otras ciudades hasta les construyen naves chingonas para mercado o tíanguis.
Se está lavando las manos y va a haber puntazos y no va a saber ni como calmar el tema.
Pero como segurito le dieron una lana los dirigentes de los ambulantes, por eso dice que está cabrón, y que es pedo de ellos.
Por eso aunque sea ciudad la Paz, todo México lo ve como pueblote.
Porque les siguen viendo la cara los caciques pueblerinos.