La Paz, Baja California Sur.– Largas filas en las cajas de las principales tiendas de autoservicio de esta capital así como en purificadoras de agua y panaderías, se formaron este viernes, en el infaltable episodio de “compras de pánico” que acompaña a la amenaza de un huracán, en este caso de Hilary, que alcanzó ya la categoría 4.
Los paceños enfilaron hacia los principales centros de abasto y tiendas de conveniencia capitalinos para avituallarse de lo necesario para enfrentar cualquier embate de la naturaleza con el refrigerador y la despensa lleno de productos hasta donde la cartera o el límite de la tarjeta lo permita:
Pan, carnes frías, leche y jugos en tetrapack, jamón, mayonesa, café, azúcar, agua purificada, latería, tortillas, huevos y galletas fueron algunos de los productos que se apreciaban en los carritos de los previsores choyeros.
Así, la ciudad sufra o no el embate de Hilary, el paceño lo recibirá con una taza de café en una mano y una exquisita vianda en la otra.
Por su parte, el Consejo Estatal de Protección Civil, aconsejó efectivamente, proveerse de agua potable y lo necesario para el hogar; pero “sin caer en compras de pánico”, pues las autoridades garantizaron “la suficiencia alimentaria y de abastecimiento de combustibles”.
Por otra parte, el Consejo Municipal de Protección Civil de La Paz anunció la tarde de este viernes, la apertura de los refugios temporales en la zona urbana, delegaciones y subdelegaciones del municipio.
Las instituciones que serán habilitadas como albergues en la ciudad son la UABCS, el Tecnológico y la Secundaria José María Garma, en el Centenario; el resto de instituciones serán «puntos de traslado» donde se concentrará a la ciudadanía para ser trasladada posteriormente a los albergues ya mencionados reportó la alcaldesa paceña, Milena Quiroga Romero.
