
La Paz, Baja California Sur .– El estado invierte 40.1 millones de pesos al año en atender a personas con enfermedades relacionadas al consumo de tabaco aseguró el Secretario de Salud en la entidad, Santiago Cervantes Aldama al inaugurar la primera clínica para dejar de fumar auspiciada por el gobierno federal en todo el país.
“El 24.6 por ciento de los pobladores de Baja California Sur son fumadores activos” expresó el funcionario durante el acto protocolario para la inauguración de la clínica celebrado la víspera del Día Internacional contra el Consumo del Tabaco.
En su discurso, el médico del estado informo que con 86 mil fumadores y una edad promedio de inicio de consumo de cigarros en Baja California Sur situada en los 17 años de edad, la entidad se coloca como uno de los focos rojos a nivel nacional para combatir esta adicción.
Aseguró que datos estadísticos permiten establecer que el consumo por día de los fumadores en Baja California Sur se encuentra en al menos 8 cigarrillos por día.
Además dijo que esta problemática afecta a otros 69 mil 500 adultos y 7 mil 500 jóvenes que son fumadores pasivos en la entidad.
El funcionario dijo que de acuerdo a estadísticas en un año (el 2009) el estado de Baja California Sur ingresó a 375 pacientes a sus servicios de salud con enfermedades asociadas al tabaco representando una inversión de 40.1 millones de pesos en los servicios de salud.
De acuerdo con las cifras de la Ley de Ingreso vigente, en un año, el estado sólo recibe 20 millones de pesos en materia de impuestos al tabaco.
La clínica, instalada en la torre del “Salvatierra viejo” ubicado en Josefa Ortiz de Domínguez y Nicolás Bravo cuenta con equipo que para ofrecer servicios de diagnóstico y valoración de la adicción a la nicotina así como el grado de avance en el daño que ha provocado la inhalación de humo de tabaco, además, personal capacitado atenderá a los pacientes a través de terapia en deshabituación avalada por la Organización Mundial de la Salud y ofrecerá, en los casos que lo valore, terapia química para acompañar el proceso emancipación del paciente del mal del tabaquismo.