
ANKARA, Turquía. – El Parlamento turco dio ayer luz verde a una posible intervención militar en la vecina Siria, tras un ataque sirio transfronterizo registrado el miércoles en el que murieron cinco civiles turcos, informan los medios en Ankara.
Con el sufragio en contra de la oposición, los legisladores aprobaron por 320 votos a favor y 129 en contra un pedido del gobierno que permite acciones al otro lado de la frontera durante un año. Se trata de una medida similar a la que en la actualidad permite atacar a los extremistas kurdos en el norte de Irak.
Sin embargo, Turquía no quiere entrar en guerra con Siria, aseguró un asesor del primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, en medio de las tensiones por los ataques transfronterizos entre ambos países.
“Turquía no tiene ningún interés en una guerra con Siria, pero Turquía tiene capacidad de proteger sus fronteras y, si es necesario, de contraatacar”, afirmó Ibrahim Kalin a través de la red social Twitter, en la que añade que continúan los esfuerzos políticos y diplomáticos.
“Este documento (aprobado por el Parlamento) no es una carta blanca para una guerra”, aseguró también el viceprimer ministro turco, Besil Atalay, informaron medios turcos. Según Atalay, la aprobación del Parlamento tiene un objetivo intimidatorio, además de permitir al gobierno que defienda los intereses nacionales.
En tanto, el Consejo de Seguridad de la ONU está discutiendo el borrador de una declaración de respuesta al ataque sirio en territorio turco y Estados Unidos alertó que debe hablar “clara y prontamente y con una sola voz” sobre la situación.
El miércoles un ataque sirio con granadas acabó con la vida de cinco civiles turcos en un pueblo de la frontera con Siria. Ankara atacó luego objetivos turcos como represalia y mató a 34 personas, según la emisora árabe Al-Yazeera, que citó fuentes sirias.
El gobierno de Turquía considera que Siria ya se disculpó por el ataque fronterizo, explicó el viceprimer ministro, Besir Atalay. Según el gobierno turco, en sus contactos con Naciones Unidas el gobierno sirio habló de un fallo y mostró su pesar por el ataque contra el pueblo turco fronterizo de Akcakale, en el que murieron una mujer y sus cuatro hijos.
Los sirios aseguraron que “a partir de ahora no volverá a pasar algo así”, apuntó Atalay, citado por la agencia Anadolu.
El ministro de Información de Siria, Omran al Subi, anunció que su gobierno investigará el ataque registrado contra un pueblo en territorio turco, según informó la agencia estatal local Sana.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se mostró alarmado ante la escalada militar en la frontera de Siria y Turquía y llamó a todas las partes a cesar la violencia, contenerse y buscar una solución pacífica.
Por su parte, el jefe de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, advirtió de un impacto negativo de las tensiones fronterizas.