
Un gobierno estatal blanquiazul, ante los embates de la crisis económica, es lo mejor que pudo pasarle a Baja California Sur, pues “el gobernador tiene, por ser del mismo partido, derecho de picaporte en Los Pinos, y en Los Pinos es donde se toman las grandes decisiones, nos guste o no”, explica el senador Luis Coppola Joffroy, reconociendo de facto la continuidad del centralismo.
Sabe que esa puerta “puede generarle más recursos, dinero, a Baja California Sur”, lo cual es indispensable, pues “el gobierno está cubriendo gastos de ayuntamientos, que no le corresponden […], porque los dejaron en bancarrota todos esos ayuntamientos”, indica. No obstante, de suscitarse la caída del poder del Partido Acción Nacional (PAN) en el 2012, puntualiza que el trató para el Estado deberá ser institucional, así como la relación entre funcionarios.
Por otra parte, considera que ha pasado “poco tiempo” como para saber qué temas debe priorizar el gobierno Estatal hasta ahora, sin embargo, opina que hay certeza de “cosas que se han hecho bien”, poniendo como ejemplo la aplicación de la Ley, “meter a la cárcel al señor César Uzcanga”, lo que calificó como “una muy buena noticia”, pues “es poner orden ya en la casa”.
En el mismo tenor, opina que “no solamente es César Uzcanga, debe de haber otros funcionarios ahí, de otro nivel, coligados con ellos, que de alguna forma cometieron tropelías, abusaron de la gente, sobre todo en el área de Los Cabos, que es donde estaba asentado ese grupo, mafioso le llamé yo, durante muchos años el grupo de mafiosos que manejaba las cosas de gobierno, encabezado por Narciso Agúndez”.