Sólo una llamada de atención y un reporte en su expediente se llevaron los policías municipales que desalojaron violentamente a una pareja de ancianos de 72 y 90 años de un rancho, de nombre Cuernavaca, en el ejido Melitón Albáñez, del municipio de La Paz. Además de haber golpeado y amenazado al subdelegado ejidal, Daniel Gaspar Lares. “Le hemos llamado la atención a todo ese grupo […] que va a aparecer en el expediente, obviamente, de los policías que estuvieron ahí”, comentó al respecto la alcaldesa de La Paz.
Luego de que María Cristina Avilés Domínguez y José Apolonio Romero, junto a un grupo de familiares, se manifestaran el pasado lunes frente al Poder Judicial de la Federación para denunciar la acción de los policías, la alcaldesa reconoció que los ancianos “fueron maltratados, que no fueron atendidos debidamente”, por lo que sostendrá una plática con Gamil Arreola Leal, procurador de justicia del estado, al respecto, pues “es un tema que le corresponde”. Mas la presidenta sólo expondrá su punto de vista, pues indica que no le concierne intervenir. “Dándole mi punto de vista personal, no me corresponde tampoco, intervenir en las decisiones que ellos tomaron”.
Por lo pronto, la pareja de ancianos, ciudadanos de La Paz, recibirán asesoría legal del ayuntamiento para “buscar alguna salida para que puedan vivir dignamente”.
Hay que recordar que el asunto se trata de una disputa legal entre dos familias. Los ancianos han cuidado el sitio por más de cuarenta años, y reclaman el sitio al igual que la familia Cosío Beltrán, quienes se declaran propietarios legales.
