La presión funcionó y aunque los camioneros se mostraban renuentes a negociar con la Dirección Estatal del Transporte, finalmente lo hicieron. Ésta volvió a ofrecerles el 40% de la obra que tiene a la Alianza y a la Coalición agarrados de los pelos. La Coalición aceptó, hoy inician trabajos y mañana firman convenio.
Aunque Gabino Espinoza Vargas, titular de la Dirección Estatal de Transporte, salía del Palacio de Gobierno a rogarles por diálogo y negociaciones, los transportistas de la Coalición de Camioneros Materialistas se negaba a seguir tratando con él, pues aseguraban que “la dirección de Transporte del Gobierno del Estado está manipulada por intereses personales”, además de ser “incompetente para arreglar los conflictos”. Cayendo la noche, la Coalición fue convencida y habló con Espinoza Vargas.
Y es que después de que la Coalición recibió la noticia, por parte de la Dirección del Transporte, de que le sería otorgado el 40% del trabajo de la plaza comercial que construye la empresa URCONSA detrás de Home Depot, a los trabajadores les fueron negadas las labores el día de ayer, así que luego de alinearse de nuevo sobre el boulevard Pino Payas en señal de protesta, acudieron al Palacio de Gobierno (y sus fuentes, y su música de Kenny G y Richie Valens), buscando presionar al gobernador del Estado, para que personalmente resolviera el problema. Marcos Covarrubias se hizo presente dos veces, a bordo de una Suburban blanca y toda una comitiva, pero no cruzó palabras con los camioneros.
Jesús Gómez, líder de la Coalición de Camioneros Materialistas, indicó el día de ayer que los traían “hechos pelotas” con las negociaciones entre ellos y la Alianza de Transportistas, exigiendo una actitud “seria, una actitud firme”, pues se trata del trabajo del 75% del gremio de transportistas de carga en Baja California Sur, y “sólo un palmo de narices” les han otorgado desde que la nueva administración está en funciones.
Gómez adjudica la culpabilidad a Francisco Márquez, líder de la Alianza, señalándolo como el manipulador de la Dirección del Transporte. Hasta que el secretario general de gobierno, Carlos Mendoza Davis o el propio gobernador no se sentara a dialogar con ellos, continuarían en plantón, confirmaban, pero Gabino Espinoza Vargas pudo con ellos o, al menos, dejó ver que una de las partes podía ceder.
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