Iván Gaxiola
A las nueve de la mañana de hoy, lunes 15, la explanada del Congreso del Estado ya había sido ocupada por familiares del joven asesinado el pasado sábado 4 de marzo; además de ciudadanos que apoyan su exigencia de justicia.
Una hora después de reclamos en altavoces y micrófonos el gobernador del estado acudió a encarar al padre de Jonathan Hernández. Narciso Agúndez prometió, de nuevo, a los padres, agilizar la extradición de Gary Gaines y se comprometió a que en una semana, como máximo, estaría bajo custodia en la cárcel del estado.
Del ex-procurador de justicia, Fernando González Rubio Cerecer, el propio gobernador asegura que no está más en la nómina. Esto no les bastó a los padres, ya que exigieron, personalmente, cárcel para el procurador, que fuese señalado como cómplice de Gary Gaines. Se habló de investigaciones. ¿Qué irán a investigar? Se sabe que tres policías ministeriales y la propia madre del asesino, los escoltaron hasta tomar el avión que lo sacara del país.
Dentro del recinto legislativo, se mostraron pancartas y se dictaron consignas. Por su parte, en un inicio, arribaron militantes del Partido Acción Nacional a unirse a las protestas ciudadanas, y reclamar, entre otras cosas, la malversación de fondos en campañas políticas.El gobernador fue recibido con gritos de ¡Justicia!, en el interior de dicho recinto y más de tres veces fue interrumpido. Exigencias que se dejaban oír por, al menos, la mitad de los asistentes..
Al parecer, la tiricia que caracteriza a los sudcalifornianos no resistirá más abusos. Algo empieza a gestarse en el seno de la sociedad sudcaliforniana.
