Varios sectores políticos afirman que los daños que pueden sufrir los recursos naturales de la Sierra de la Laguna por la extracción de oro son irreversibles.
Esta semana el Consejo Estatal Forestal analiza la documentación oficial recibida para dictaminar la procedencia o no del proyecto Paredones Amarillos. Esto ha llevado a la diputada Ady Margarita Núñez Abín a pedir a todos los integrantes del Consejo oponerse a los daños que podría sufrir la Sierra de la Laguna, al tiempo que exhortó a la ciudadanía a demandar la protección de los recursos naturales y rechazar el enorme riesgo que el proyecto representa para el Estado.
Núñez Abín reiteró que la población de los alrededores de la Sierra de la Laguna «demandan que contribuyamos a evitar la realización del proyecto Paredones Amarillos, que pretende explotar durante 10 años una mina a tajo abierto en una parte alta de la sierra para extraer oro, actividad altamente contaminante que además de usar explosivos liberan cianuro, arsénico, mercurio y otros metales pesados».
El proyecto Paredones Amarillos, pretende explotar durante 10 años una mina en una parte alta de la sierra para extraer oro una actividad altamente contaminante
«Estas sustancias -apuntó- se depositarían en una presa de jales, que de acuerdo a la experiencia en otros sitios del país pueden provocar grandes problemas al presentar derrames por fallas técnicas y por fenómenos naturales». En este sentido, recordó que entre 1987 y 2008, se registraron 19 accidentes graves en presas de jales, como ha sucedido en la Mina negra de Cadereyta, Querétaro o en la mina Autlán, en Hidalgo.
«Eso es lo que no queremos para Baja California Sur, la Sierra de la Laguna es una área natural protegida por su biodiversidad y abastece de agua al sur del Estado», señaló al advertir «no podemos arriesgar por oro «nuestros mantos acuíferos, nuestra riqueza natural y la salud de los habitantes de la entidad».
Para concluir Núñez Abín exhortó a la ciudadanía en general «a demandar la protección de nuestros recursos, a expresarse ahora y oponerse al enorme riesgo que este proyecto representa, ya que en esta semana el Consejo analiza la información recibida y la próxima emite su dictamen».